BREVE EXPLICACIÓN SOBRE las TRES VIRTUDES TEOLOGALES de la IGLESIA CATÓLICA
La virtud es la costumbre de obrar el bien adquirida con la repetición de actos buenos.
Es contraria al vicio, que es el hábito de obrar el mal adquirido con la repetición de actos malos.
Las virtudes teologales necesarias para salvarse son tres: la Fe, la Esperanza y la Caridad.
El término virtud teologal significa tener la costumbre de realizar obras buenas para Dios y por Dios.
Dios infunde en nuestras almas las virtudes de la Fe, de la Esperanza y de la Caridad.
Llegados al uso de razón debemos hacer actos de fe, esperanza y caridad.
La Fe es una virtud sobrenatural por la cual creemos que es verdad todo lo que Dios ha revelado.
Nosotros conocemos todo lo que Dios ha revelado a través de la Iglesia, que nos lo enseña.
Además, creemos que es verdad todo lo que Dios ha revelado, porque sabemos que Dios no puede ni engañarse ni engañarnos.
La Esperanza es una virtud sobrenatural por la cual esperamos la vida eterna y los medios para conseguirla.
Con la Esperanza, creemos firmemente, que esta vida terrena nos va a conceder todo lo que sea necesario para poder conseguir la salvación a través de los méritos de Jesucristo.
Gracias a esta virtud, cuando estamos tristes o pesimistas, todo lo vemos desde un punto de vista positivo ya que la Esperanza nos da fuerza y nos cambia el corazón de la tristeza a la alegría, gracias a la espera de la felicidad de la eternidad.
La Caridad es una virtud sobrenatural por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a nosotros mismos.
La Caridad nos esfuerza a cumplir los mandamientos y a hacer todo lo posible por no caer en pecado, realizando de este modo actos de amor hacia Dios.
- REPRESENTACIONES GRAFICAS
La Fe se representa con una mujer sosteniendo la cruz con la mano derecha y con una antorcha en la izquierda.
La Esperanza es representada con una mujer sosteniendo una corona en la derecha y un áncora en la izquierda.
La Caridad es representada con una mujer sosteniendo un cáliz coronado por una hostia en la mano derecha y un corazón inflamado del pecho.
Estas tres representaciones las pueden ver claramente en la imagen de este artículo, con sus correspondientes ejemplos bíblicos (Fe: Abraham va a matar a su hijo Isaac; Esperanza: el libro de Job; Caridad: María Magdalena lava los pies de Jesús)
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